Desde la flexibilización del cepo para «personas humanas», la compra de dólares en el mercado oficial de cambios viene batiendo récords mes a mes. Si bien la demanda para ahorro y para turismo explica buena parte de la salida de divisas, casi la mitad de las operaciones se realizan contra cuentas del exterior, lo cual puede estar reflejando la elusión de las restricciones por parte de las empresas, según especialistas.
Tal como remarcó Ámbito, a partir de un informe publicado la semana pasada por el Banco Central (BCRA), en julio la compra neta de dólar «billete» alcanzó unos u$s3.041 millones. Desde que la autoridad monetaria tiene registros (enero de 2007), esta cifra solo fue superada por el dato de octubre de 2019, previo a la imposición del cepo de u$s200 por parte del gobierno de Mauricio Macri.
Asimismo, si se tienen en cuenta todos los conceptos que hacen a la Formación de Activos Externos (FAE) de personas, el número asciende a u$s5.807 millones. En este caso sí se trató de un récord absoluto.
La estrategia de las empresas para eludir el cepo y cancelar deudas
Puntualmente llama la atención la relevancia del componente contabilizado como «otras inversiones», que desde abril representó una compra de u$7.541 millones (u$s2.980 millones solo en julio), explicando así el 47,5% de la FAE. Según explicó a este medio el director de la consultora C-P, Pablo Moldovan, estas operaciones se hacen contra cuentas del exterior y «pueden asociarse a compras que abastecen la elusión del cepo sobre empresas y complican la gestión cambiaria«.
El economista detalló que estas divisas en cuentas del exterior aportan oferta al mercado del dólar CCL, las cuales les permiten a las empresas cancelar deuda externa a un precio similar al del oficial (este lunes el mayorista cerró en $1.372, mientras que el CCL lo hizo en $1.391).
Moldovan agregó que incluso el propio BCRA reconoce este tipo de maniobras al plasmar en su informe que «en julio los importadores habrían cancelado obligaciones por importaciones por u$s1.400 millones a través de mercados alternativos al oficial y Bopreales».
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Algo similar opinó Federico Machado, economista del Observatorio de Políticas para la Economía Nacional (OPEN). «Es muy posible que la magnitud extraordinaria de la FAE de estos meses se deba al arbitraje entre oficial y financieros, que surge de la restricción de las empresas a comprar dólares. De esta forma, personas humanas compran divisas al oficial y las venden a empresas mediante financieros, arbitrando ambos mercados«, profundizó.
Cepo al dólar: ¿más cerca de eliminarlo por completo o de restablecer restricciones?
Con el relajamiento del cepo, el Gobierno esperaba enviar una señal positiva a los mercados, en medio del cierre de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que generara calma en las cotizaciones del dólar e impulsara el precio de los activos argentinos. Sin embargo, la volatilidad financiera desatada a partir del fallido desarme de las Lefis, el estancamiento de la actividad económica y los presuntos escándalos de corrupción al interior del oficialismo interrumpieron ese optimismo que parecía generarse.
Debido a este combo de factores, y ante la proximidad de las elecciones legislativas en la Provincia de Buenos Aires, la demanda de cobertura en moneda «dura» se incrementó. En ese marco, la apertura de la FAE y la mencionada elusión por parte de las empresas complica la gestión de la política cambiaria.
Frente a este escenario, cabe preguntarse si el equipo económico está más cerca de levantar por completo el cepo, o de restaurar restricciones. Al respecto, Machado sostuvo que «lo más lógico sería abrir más el cepo para tender a normalizar el arbitraje financiero que están haciendo las empresas».
Por su parte, el analista Amílcar Collante expresó que una vuelta atrás con el cepo sería contraproducente en materia de expectativas, aunque agregó que todo depende del resultado electoral y del apoyo proveniente desde Estados Unidos y el FMI. «Solo veo un recalibramiento del cepo tras un resultado muy adverso en las elecciones, algo que por ahora no está en el escenario».
En una línea similar, Guido Zack, director de Economía de Fundar, señaló como positiva la quita de restricciones para personas humanas y marcó como el principal problema la serie de «errores no forzados que vinieron a partir de la eliminación de las Lefis». «Con cepo relajado, no podés hacer cualquier cosa con las tasas», profundizó.
Desde el Poder Ejecutivo aseguran que estas turbulencias son producto de intentos desestabilizadores de parte de la oposición, la cual busca borrar el superávit fiscal. En consecuencia, según su relato, unas elecciones favorables para La Libertad Avanza allanarían el camino para una normalización de la economía, que incluiría la vuelta a los mercados internacionales de deuda y el fin definitivo del cepo.